Flora y fauna

Flora

El Parque Natural alberga una gran variedad de ecosistemas diferentes: acantilados, bosques, cuevas, campos de cultivo, roquedos, bancales, ríos, núcleos urbanos… Esta enorme diversidad de espacios, unida a las características geológicas y meteorológicas del entorno, así́ como el respeto que las gentes han tenido hacia este espacio durante años, han permitido a la naturaleza aflorar en la Sierra de Mariola de muchas maneras.

Solo en cuanto a flora, dentro de los límites del Parque Natural se han identificado al menos 1200 especies diferentes de plantas, encontrando algunas de ellas en Mariola el único lugar en el que prosperar en la Comunidad Valenciana, o incluso en el mundo.

Los bosques de Mariola son principalmente de pinos, fruto de su fácil prosperidad tras los incendios, ya que el fuego es un eslabón clave en el medio mediterráneo. Además, encontramos bosques mixtos de carrascas y árboles de hoja caduca, que encuentran en la sierra uno de los pocos puntos en los que prosperar en estas latitudes. En el municipio homónimo encontramos la Teixera d’Agres, donde aún queda el bosque de tejos más meridional de Europa.

Además, la variedad de arbustos y plantas aromáticas presentes en la sierra de Mariola dan lugar a un gran abanico visual y olfativo según la época en que se visite el Parque, ya que sus flores engalanan todos los paisajes. Muchas de estas plantas forman parte de la receta tradicional del Herbero de Mariola, bebida espirituosa tradicional a base de hierbas aromáticas. Una de las plantas que lo compone es la salvia de Mariola, famosa por sus numerosas propiedades terapéuticas y por ser propia de este Parque Natural.

 

Fauna

La fauna también ha encontrado en esta sierra su remanso de paz, y dentro del Parque Natural podemos encontrar una enorme variedad de animales, desde pequeños insectos hasta grandes mamíferos y aves rapaces.

Las áreas de arbustos albergan numerosas especies de reptiles, mientras que en los ríos podemos encontrar tortugas de agua, cangrejos de río, peces, anfibios y aves acuáticas sin demasiada dificultad. En los bosques muchas aves migratorias encuentran un lugar en el que realizar un descanso, y otras construyen sus nidos allí́: de hecho, la variedad de aves es enorme. A lo largo del año se pueden encontrar hasta 120 especies diferentes.

En los roquedos cercanos al Barranc del Cint, los buitres leonados que fueron reintroducidos por el proyecto Canyet han encontrado el único lugar en el que anidar en cientos de kilómetros, tras muchos años de permanecer extintos. En el Canyet de les Pedreres de Sant Cristòfol está establecida la buitrera, donde se les alimenta y pueden ser observados junto a muchos otros animales carroñeros desde un observatorio.

En lo más profundo del bosque, no sólo podemos encontrar jabalíes, arruís o búhos reales: en este Parque Natural se encuentra la única población conocida de zorro rojo que presenta el pelaje completamente negro, fruto de una variación genética. ¿Tendrás suerte de ver un zorro negro?

Es fundamental comprender la enorme variedad y riqueza de seres vivos que ha perdurado hasta el día de hoy en la Sierra de Mariola, fruto de la protección de esta sierra y su entorno durante muchos años. Por ello, debemos respetar la vida salvaje e intentar perturbarla lo más mínimo.